Un anuncio, una canción y Chispas

 

Un anuncio, una canción y Chispas ¿Te acuerdas?

La publicidad es sinónimo de radio. De cuñas y jingles que se escuchaban para acompañar la pieza publicitaria. Melodías sencillas, pegadizas y verdaderas obras de arte que la gente tarareaba en su día a día.

El otro día charlando con una persona comenzamos a recordar anuncios televisivos y curiosamente nos venían a la mente todos los que iban a acompañados de alguna canción. No importaba si habíamos consumido o no el producto, sencillamente «nos sonaba».

Canciones y anuncios van de la mano

Vamos a hacer hoy un recorrido por algunas de esas piezas que forman parte de la niñez, adolescencia e incluso de alguna asignatura para quienes estén cursando la licenciatura en Publicidad o sencillamente sientan cierta simpatía por esta forma de comunicación. ¿Te apetece?

¿Recuerdas a este chica que era divina y nueva en la oficina?

 

La colonia Chispas formaba parte del paso de la niñez a la adolescencia 

Año 2023. En publicidad hay ciertas cosas que no cambian, por ejemplo los anuncios sobre perfumes. Da igual la década, los 90, los 2000. En pantalla aparece una chica que te mira perdonándote la vida, flota sobre las aguas y de fondo se oye una voz en off que dice en francés (no vale otro idiomas) alguna frase sin mucho sentido.

Respecto a canciones… Intento recordar alguna que se me haya quedado grabada y me cuesta. Ahora, las canciones se asocian a series de plataformas pero no a anuncios. Quizás es que vayan tan rápido que no les prestamos la misma atención que hace unas décadas. O igual andamos escasos de creatividad.

En las radios locales es más común encontrar alguna cuña con una frase al final que se entona con mayor o menor gracia. A mí me parece tierno e incluso efectivo. Mientras tecleo me viene a la mente Carglass Cambia Carglass Repara, un éxito. Esta melodía y su letra la encuentras en televisión, radio e Internet con mucha dignidad. ¿Logró su objetivo? Creo que sí. Que dentro de unos años este anuncio se seguirá recordando.

 

Joana Sánchez